Dieguito ha seguido muy delicado y todavía no ha despertado. Si bien lo veo mejor que el día de ayer, donde solamente durmió y abrió los ojos para llorar, todavía no come y no toma nada. Debido a esto no pudo tomar sus medicamentos regularmente por lo que le pedí a la enfermera le coloquemos una sonda, espero que si él empieza a tomar sus medicamentos regularmente se recupere, pues además de la cirugía recibió una dosis fuerte de sedante para controlar una crisis convulsiva que tuvo el martes; y no tomó sus anticonvulsivos regularmente.
Los doctores luego de ver la resonancia, el escáner y los electro encefalogramas tomados nos indicaron que su cerebro está sanito y la actividad se está recuperando, que consideremos la cantidad de sedante que recibió y las tres cirugías. Pensábamos salir del hospital el viernes o el sábado, pero como sigue delicado se queda hasta el lunes y ahí vamos a ver como está. Lo que se necesita es que se recupere, que muestre que está despierto 100% y que pueda comer sin problemas, requisitos que todavía no cumple ninguno. Después de la crisis, durante las 20 horas que estuvo con video electroencefalograma no registraron convulsiones, por lo que ahora salió de cuidado intensivo y pasamos al pabellón pediátrico normal.
Tenemos fe ahora que podemos darle los anticonvulsivos normalmente, Dieguito se va a recuperar este fin de semana y el lunes podrá salir del hospital e ir a la Casa RMcD, pues allá se va a poder distraer con otros niños y empezar a olvidar de los hospitales de a poco. Tampoco tenemos mucha información respecto a cuándo podremos irnos, si todo sale de acuerdo a lo estimado a fines de la próxima semana deberíamos estar dados de alta. Sin embargo como es un viaje de casi doce horas, los doctores no quieren comprometerse con una fecha estimada y nos indicaron que esperemos hasta el lunes; cosa que me complica porque se deben ver los pasajes de vuelta con anticipación, pero sabemos que contamos con la ayuda de Dios y la Matter, y que estas pequeñas complicaciones no deben distraernos de lo más importante que es la salud de mi niño, los detalles se los dejamos a ellos que hasta ahora no nos han fallado.
De corazón lo único que quisiera ahora es poder viajar el viernes, estar con mi María Laura para Halloween, y disfrutar el verano con todo para que mi Dieguito se recupere y olvide lo sufrido. Ayer cuando le cambiaron los vendajes y vi las heridas de las cirugías, sentí en el corazón todo lo que ha pasado este niño, su valentía me llena de orgullo al ver como ha sobrellevado este periodo, portándose bien y siendo tan lindo en todas circunstancias.
Andaba tan cansado que ni yo me aguantaba, pasé a rezar un rato y me vino un optimismo a full, todo esto se va a acabar rápido, vamos a volver a Santiago y hacer todo lo que debemos hacer por nuestra familia; luego llegando a la casa el Señor me tenía otro milagro para que empecemos bien el despegue………………….Blooming salió campeón por quinta vez después de que nadie daba un peso por el equipo. Como en pedir no hay engaños, lo único que pediré ahora es que no pasemos vergüenza en la Libertadores y ojala nos toque viajar a Santiago, pero no en mis oraciones sino en mis sueños.
Los doctores siempre nos indicaron que Diego era un caso complicado, y por eso terminamos acá, o de otra manera se hubiese operado en Santiago; pero como la presencia de Dios y la Matter han sido más que evidentes en toda nuestra aventura, soñamos mucho que venga este equipo médico de eminencias y que con la iluminación del Espíritu Santo borrarían milagrosamente las convulsiones de la vida de mi bebé, llegando a hacernos muchas ilusiones y expectativas a partir de aquello.
El resultado final de la cirugía no fue el esperado, pues no se puede identificar un foco donde se inicien las convulsiones, y debemos continuar con nuestra lucha. Pero el resultado del viaje ha sido totalmente espectacular, donde han sucedido cosas que nunca esperamos y que siempre agradeceremos a Dios y la Matter por habernos guiado y ayudado a venir a éste lugar.
En primer lugar, si operábamos a Diego en Santiago y obteníamos el mismo resultado no hubiésemos quedado tranquilos y siempre nos preguntaríamos que hubiese pasado si veníamos a NY. Al ser un resultado tan categórico y ver el equipo médico que estuvo a cargo del estudio uno confía en la recomendación.
También conocimos a los doctores, secretarias, y todo el sistema acá en NYU, por lo que ya estamos planificando contacto con nuestro neurólogo en Santiago y de acá le van a enviar un par de recomendaciones para el tratamiento de Dieguito. Además ellos van a hacer un seguimiento de nuestro caso y les enviaremos información periódicamente para identificar si hay alguna señal que indique que las convulsiones estarían focalizando.
El viaje ha servido para que crezcamos como personas y como familia, porque lo vivido estas semanas ha sido un curso intensivo del significado del amor, de la familia y la importancia de la fe en todo momento. Me cuesta tanto expresar sentimientos con palabras, a diferencia de Alejandra que es puro corazón y le sale naturalmente, pero las personas que ha puesto Dios en nuestro viaje han sido personas totalmente maravillosas y ejemplares, empezando por mi tía Jenny que dejó todo de lado para venir a acompañarnos y apoyarnos en todo momento, con su fe tan fuerte en el Divino Niño Jesús, su optimismo y comprensión cuando estaba cansado y por lo tanto odioso. Tampoco se podrá olvidar las familias que conocimos tanto en el hospital como en la casa RMcD, después de compartir con ellos y llegar a conocerlos nos damos cuenta lo que significa el amor incondicional de un padre y lo que están dispuestos a hacer para darles una oportunidad de vivir. Se ven y aprenden cosas en la vida que llegan a cambiar la visión que uno pueda tener de ella, agradecer a Dios todo lo que se ha recibido de él, por querer siempre más uno se puede nublar y no ver tantas cosas que nos ha dado el Señor y nos acordamos de él cuándo lo necesitamos.
Con Alejandra decidimos abrir nuestra vida, nuestra familia y nuestro corazón hacia todos ustedes, con la esperanza de que al solicitar oraciones para Dieguito podamos entregarles nuestra mayor riqueza, ésta es la oración familiar. Juan Pablo II nos dijo “familia que reza unida, se mantiene unida”, y esto es lo mejor que nos ha pasado como matrimonio. A pesar que son tantas cosas que se pueden agregar al respecto, lo que queremos compartir es que Dios y la Virgen María fueron invitados a ser parte de nuestra familia desde que nos casamos, pero cuando lo hicimos no vislumbramos cuánto íbamos a necesitarlos y que nunca nos iban a abandonar, han estado con nosotros desde el primer momento y nunca nos han fallado cuando hemos tenido algún problema. Sin ésta presencia probablemente ya estuviésemos separados, pues hemos visto que sucede aquello en muchas familias que están enfrentadas a algo tan fuerte, sin fe no pueden sobrellevar la presión y el cansancio. Para nuestra familia ha sido todo lo contrario, nos ha unido más y el amor que tenemos el uno por el otro ha crecido más, incluyendo a María Laura que cada día quiere más a su hermanito. Vean las caras de sus niños cuando recen, la inocencia y la fe que tienen, vean a su pareja cuando recen y recuerden el amor que tienen por aquella persona, y van a entender lo que dijo JP II.